¿Cuál debe ser la temperatura del aire acondicionado en invierno?

Algunos aparatos permiten graduar la temperatura del aire acondicionado en invierno, son las denominadas bombas de calor. ¿A qué temperatura debemos ponerlas?

Laura Hidalgo

Laura Hidalgo

Muchos aparatos permiten utilizar el aire acondicionado en invierno: son las denominadas bombas de calor.

VIDEO: ¿CUÁL ES LA TEMPERATURA IDEAL DEL AIRE ACONDICIONADO EN INVIERNO?

Aunque parezca una contradicción no lo es, ¡es posible utilizar el aire acondicionado en invierno!. Muchos aparatos se pueden aprovechar como calefacción, ya que tienen una bomba de calor. 

El aire acondicionado en invierno debe ponerse a una temperatura media de 20-22 grados en el día. La temperatura ideal por tanto serían los 21 grados. Si aumentamos la temperatura del aire acondicionado incrementará más del 7% el consumo. Además, temperaturas superiores a los 23 grados resecan y provocan incomodidad.

En verano se suele recomendar que la temperatura ronde los 23-25 grados para que al salir al exterior el golpe de calor no sea tan agresivo. En el caso de la temperatura del aire acondicionado en invierno es preferible que ronde los 20 grados para que sea más equiparada a la temperatura de fuera, sin que tengamos frío dentro de casa.

Es también importante graduar la dirección en la que sale el aire. En invierno es recomendable que el aire se oriente hacia abajo, al contrario que en verano. Hay que tener en cuenta que el aire caliente tiene tendencia natural a subir.

Cuando llega la noche la temperatura del aire acondicionado en invierno debe rondar los 15-17 grados. No se recomienda dormir con la calefacción puesta toda la noche. Es mejor calentar la habitación hasta una hora antes de acostarte y, de ese modo podrás meterte en la cama con la habitación caliente.

Intenta también tomar bebidas calientes para que tu temperatura corporal se regule y entres en calor más rápido. Son muchas las opciones de bebidas calientes saludables. ¡Es más económico y beneficioso!

Otra alternativa, si tu aparato de aire acondicionado te lo permite, es programar la calefacción un poco antes de llegar a casa. De ese modo la casa empezará a calentarse y no será necesario aumentar tanto los grados al principio para compensar el frío exterior.

Además, es recomendable utilizar equipos de bajo consumo que nos permitan ahorrar en la factura de la luz. La mejor etiqueta de los equipos de consumo es la A. Esta nos indica que los equipos consumen menos energía que los de las clases B y C. ¡También puedes optar por hacer tu propia calefacción casera!